Neko

Y yo con estas calores tan malísimas para el cuerpo aquí metida. Se ha ido hasta la Justa al pueblo y ni se ha dignado a decirme que si queremos ir unos días. Eso sí, que le riegue las plantas y que cuide del gato. Pues para esas estoy yo, para darle frinquis al gato. Y mis niños achicharraítos y como no tenemos en el barrio ni piscina municipal ni nada, ayer me fui con ellos de visita istructiva al zoológico. Para empezar me quede tiesa con el precio de la entrada y luego adentro que si comida para los monos, que si comida para los gansos. Y mis niños no van a ser menos que los otros, aunque les guste el cantimpalo, que como yo digo: un bocadillo de chorizo pues bien sano es. Todo iba a las mil maravillas hasta que llegamos donde los delfines dan el espectáculo. Después de hacer una hora de cola con un sol de justicia y de conseguir ponernos en primera fila, porque a mi Kevin le gusta mucho esto de los delfines y los dinosaurios, pues va una chica que es la que da el espectáculo con los delfines y pide dos voluntarios. Pues mi Kevin fue el primero en levantar la mano, pero al lado había otro niño que se le veía que iba vestido de butique y la chica del espectaculo en vez de coger a mi Kevin para la demostración, pues va y coge al que va de butique y yo le digo: Mira guapa, hasta ahí podríamos llegar, o coges a mi Kevin o te parto los morros. Pues la del espectáculo en vez de coger a mi Kevin llamó a los guardias de seguridad y antes de que los delfines salieran de las jaulas suacuaticas, nosotros ya estabamos cogiendo el autobús. Y se lo acabo de contar a mi Paco va y me dice cuando le explico la sofoquina: A tí te tendrían que meter en una jaula que tienes menos cerebro que los monos. Y yo le he soltado: Pues sabes lo que te digo: que a partir de mañana te busques a otra porque a mi me tenéis hasta ahí. Y me he encerrado en la habitación y en vez de llorar me he puesto a contar a través de la red cibercinética lo que me ha pasado. Para que todo el universo se entere del tremendo animal que tengo por marido.