Neko

Si, ya sé que el ultimo bloc lo titulé Aironsai que era una serie que a mi madre y a mi abuela les gustaba muchísimo, sobre todo porque no conocían a nadie con paralís que fuera actor de cine y que además hablara tan bien. Esta la he titulado Misión Imposible porque lo que me espera a mi es mas gordo que la tontería esa de la misión del Toncruis. Lo que me pasa hoy, después de la sofoquina del otro dia es que creo que ya no quiero al sinvergüenza y lo mejor que puedo hacer es desepararme, pero claro, tengo otro problema muy grandísimo que es que a donde voy yo, sin estudios, sin trabajo y con dos chiquillos. Al sinvergüenza le hablo con normalidad, aunque el está mosqueado como un mono porque no entiende que hacía yo en la puerta de su trabajo el día que había quedado con la querida, sobre todo porque está convencido que soy una ignorante y es verdad, soy una ignorante de no haberme dado cuenta antes del pedazo de mamerto con el que me había casado. Me he vuelto a perder. A ver, que hoy es el santo del Migue de la Justa y como el me regaló el dominio que me hace la vida más facil que el fairy, yo, esta mañana, cuando lo he visto asomar por el patio de luces le he pegado un chillido y le he dicho: Migue, sube que tengo un problema con el ordenador. Lo del problema era mentira, pero es que el Migue sólo sube si tengo un problema cibercinético o sabe que voy a hacer migas. El Migue ha subido con esa cara de colgado que tiene a las 10 de la mañana y en cuanto ha entrado por la puerta, le he hecho pasar a la cocina. Allí, en la cocina, le tenía preparado un plato de migas con chorizo y una cocacola de litro y medio. En cuanto ha visto el plato se ha olvidado de todo y se ha puesto a tragar migas mientras me decía: Como tenrollas Maru, eres la mejor del distrito federá, tía. Y yo le he dicho: Esto te lo he preparado porque hoy es San Miguel y he querido felicitarte como es debido. Y con la boca llena de migas suelta: Tía, como llevas lo del ligue del maromo. Y yo, no sé lo que me ha pasado por mi celebro que le he dicho: Mira Migue, en cuanto me ponga a buscar un trabajo, pues, que me deseparo. No jodas tía Que me deseparo Migue, que me deseparo, pero mi problema es que no sé adonde dedirigirme. Y el Migue ha bebido a morro la cocacola de litro y medio que he pensado en ese momento que, vaya forma de echar a perder una cocacola de litro y medio, y me dice: Pues tía, hay unas empresas que te apuntas y a veces te dan curro y, si eres buena currante, te dan más curro y si le gustas a la empresa adonde te mandan pues a lo mejor te contratan y todo. Y a mí se me ha abierto el cielo y la tierra y todo y han sonado las trompetas de los ángeles músicos de nuestro señor y le he pedido la dirección al Migue. Me ha dicho que hay por todas partes y que al lado del de los pollos han abierto una. Y el Migue se ha acabado las migas y yo me he sentido la mujer más importante de la galasia.