Neko

A las nueve en punto estábamos mis niños y yo en la plaza del barrio esperando el autobús. A ellos los puse despó pero yo me arreglé un poco porque si iba a conocer al jefe del Migue y a lo mejor me daba trabajo, pues tenía que estar en buen estado. El Migue ya llegó montado en el autobús y me saludo con la mano y todas las personas humanas que iban ya dentro nos miraron fijamente, porque estos autobuses van recogiendo a las personas desde que salen de las cocheras hasta mi barrio, que es el último que existe en la ciudad y creo que en la galaxia. Pues de la más joven de las personas humanas que iban en el autobús yo parecía su bisnieta y como yo iba tan arreglada y tan apretada, pues las personas humanas hombres de la tercera edad que iban en el autobús pues parecia que se les iba a caer la dentadura en cuanto me descuidara porque no cerraron la boca hasta que llegamos a la primera parada, la del bocadillo de embutido variado. El Migue me dijo que el jefe era mu importante y que no viajaba en el autobús, que va directamente a vender las mantas de Toledo, porque lleva normalemente dos o tres excursiones y no tiene tiempo que perder. Yo, esto no lo entendí muy bien, pero puse cara de interesante y me sente mirando al vacío. Lo que no me podía quitar de mi cabeza era el pensar como se iban a comer el bocadillo de embutido las personas humanas tan mayores. Cuando llegamos al Bar-restaurante Los Gutierrez, el autobús en pleno se lanzó sobre los bocadillos como unos pofesionales y antes de que mi Kevin dijera: mama, questo no me gusta, quiero un poskitos, ya estaban tomándose el café descafeinado con las gotas tomacales. Yo no repetí de chorizo porque me dijo el Migue que me iba a jartá y que me resguardara para el papeo del mediodía. Cuando llegamos al segundo Bar-restaurante Los Gutierrez II ya nos esperaba el jefe del Migue. Era un señor con bigote, mayor y bien vestido, con la camisa abierta de par en par y con una cadena de oro que debía pesar al menos medio kilo. También llevaba un anillo con un escudo lleno de piedras rojas y la uña del dedo pequeño larga como la de un buitre leonardo. El jefe del Migue se llama Maldonado y el Migue me presentó como una amiga mu necesitá de trabajo y con muchas características personales. Yo me creo eso de las características personales quiere decir que soy muy apañada, pero claro, con lo poco que entiendo de todo volví a poner cara de interesante y volví a mirar al vacío, que eso lo ensayé el otro día en mi casa y me queda muy bien. Ahora no puedo seguir que el sinvergüenza no sé que quiere y mi Kevin está voceando y a mi es que no me dejan ni esplicarme, ni realizarme ni nada de nada